Comienza a endeudarse la iglesia católica a causa de los estragos económicos generados por la pandemia de COVID-19, toda vez que la Arquidiócesis ha tenido que recurrir a préstamos para solventar ciertos gastos.
Francisco Javier Chavolla Ramos, Arzobispo de Toluca en entrevista de radio al programa “Voces de Esperanza”, agregó que además siguen otorgando apoyos a los sacerdotes de la tercera edad con la compra de medicamentos y su alimentación.
“No solo la iglesia ha sufrido los estragos de la pandemia, sino varias empresas de diversos giros e incluso muchos ha ‘tronado’, lo que ha provocado que tengan que despedir a los empleados o reducir su percepción económica”.
Chavolla Ramos, lamentó la actual situación económica que atraviesan miles de familias derivado del impacto que ha tenido la contingencia sanitaria, genere desesperación entre los pilares de la misma, quienes se preocupan por solventar los gasto diarios, “es por esos que debemos orar por todos ellos”.
“Es necesario, estar en permanente oración para que se recupere cuanto antes la economía en el país y en el Estado de México, pero primeramente para que el pueblo se libere de esta pandemia; pues también hay muchos negocios que están en quiebra y han tenido que cerrar. Los mismos restaurantes lucen cerrados y aunque abren, tienen problemas graves de dinero”.
La iglesia misma, dijo monseñor Chavolla Ramos, no tiene recursos, inclusive para poder cubrir algunos gastos como la atención de sacerdotes enfermos se ha visto obligada a solicitar algunos préstamos y no abandonarlos.
Finalmente señaló el Arzobispo de Toluca, también nos hemos visto en la necesidad de reducir los apoyos que reciben los sacerdotes, con el fin de cuidar los recursos, toda vez que la iglesia vive al día y ante esta situación solo hay egresos y nada de ingresos.