
Con una visión estratégica que prioriza la accesibilidad al agua potable como
un factor fundamental de la equidad y la justicia social, el Gobierno del
Estado de México invierte más de mil 200 millones de pesos en el desarrollo de
proyectos de infraestructura hidráulica que se ejecutarán este año.
Esta inversión sin precedente beneficiará a los habitantes de las regiones
donde se ubican los municipios de Nezahualcóyotl, Malinalco, Atenco, Temoaya,
Jilotepec, Texcoco, Timilpan, Villa del Carbón, Tenancingo, Ixtlahuaca y
comunidades indígenas de Donato Guerra, entre otros, informó Rafael Díaz Leal
Barrueta, Secretario de Obra Pública.
El propósito es cubrir la creciente demanda de agua potable que tiene el
estado, cuya población, superior a los 17 millones de personas, representa el
13 por ciento del total nacional, de acuerdo con datos del Instituto Nacional
de Estadística y Geografía (INEGI).
La Secretaría de Obra Pública es la dependencia que se encarga de diseñar e
implementar políticas hídricas que promuevan el cuidado del medio ambiente,
garanticen la disponibilidad de agua y la gestión sostenible de los
ecosistemas, para lograr la resiliencia hídrica de largo plazo, retos
planteados en el Plan de Desarrollo del Estado de México 2017-2023.
Es a través de la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM), que la
dependencia ejecuta acciones precisas, alineadas a los objetivos de desarrollo
sostenible de la Agenda 2030 de la ONU, específicamente al número seis, que se
refiere a las acciones para “garantizar la disponibilidad de agua y su gestión
sostenible y el saneamiento para todos”, con el propósito solventar los retos
en materia hídrica que caracterizan a la entidad.
De acuerdo con el Plan de Desarrollo, entre estos retos destaca la sustitución
de infraestructura, ya que, pese a que se da mantenimiento a la misma, existen
equipos obsoletos que no han sido reemplazados. Otro reto es disminuir la
pérdida de agua por fugas, en la infraestructura que ha rebasado su vida útil.
Estas premisas se cumplieron en el municipio de Nezahualcóyotl, donde el
Gobernador Alfredo Del Mazo Maza tomó la decisión de coordinar esfuerzos con el
Gobierno de la República para sustituir la tubería de más de 50 años de
antigüedad e instalar una nueva red de abastecimiento de más de 250 kilómetros.
Actualmente, ningún estado o municipio realiza una obra de esta proporción, en
la que se invierten más de 850 millones de pesos, puntualizó el Secretario de
Obra Pública.
El uso de tecnología de punta que disminuye al mínimo la necesidad de hacer
excavaciones a cielo abierto, ha permitido recortar los tiempos de construcción
y reducir al mínimo las molestias para los habitantes de las 66 colonias que se
verán beneficiados y que casi no notan la impresionante red de tubería que se
teje debajo de sus calles, la cual lleva, a la fecha, un avance físico del 32
por ciento.
“Sí vamos a ver un beneficio que va a socorrer el agua, va a ser para beneficio
de nosotros y de nuestros hijos; en corto plazo serían las molestias”, afirmó
Karina Ramírez, vecina y comerciante de Nezahualcóyotl.
La cobertura de agua potable en el Estado de México es del 97.5 por ciento,
índice superior a la media nacional que es del 92.5 por ciento, la meta del
Gobierno de Alfredo Del Mazo es alcanzar el 98.5 en el año 2023.
Con esa hoja de ruta que ha trazado el Gobernador, recientemente la CAEM puso
en operación, en el municipio de Donato Guerra, el pozo profundo “San Antonio”,
que beneficia a las comunidades indígenas Puerto de la Cruz, La Subestación y
la Nueva Colonia Tres Puentes.
“Muchos años batallamos, pero gracias a Dios lo logramos. Ya tenemos agua en la
casa. Nunca había tenido una gota de agua en mi casa, tenía que acarrearla de
lejos, en carretilla, en un caballo, con cántaro.
“Para lavar me iba hasta el canal, al arroyo. Todos están bien contentos porque
ahora tenemos agua para lavar, para bañarnos, para todo”, contó Filiberta
Jordán, vecina de la comunidad Puerto de la Cruz, de Donato Guerra.
Además, la CAEM construye una línea y red de distribución de agua potable en
Malinalco, donde los vecinos de la comunidad de San Simón el Alto se verán
beneficiados por esta inversión de 10.77 millones de pesos.
En el municipio de Ixtlahuaca, se invierten 6.8 millones de pesos para dotar de
agua a los habitantes de La Guadalupana, con la construcción de la red de agua
potable.
De igual manera, en Atenco la CAEM lleva a cabo la construcción de un tanque
elevado y una línea de alimentación a la red de agua potable, con una inversión
de 3.36 millones de pesos.
En el Estado de México existe claridad de las necesidades hídricas de la
población, es por ello que los esfuerzos del Gobierno estatal pasan
necesariamente por la coordinación con los Gobiernos de la República y de los
municipios, con el propósito de hacer más eficiente la gestión integral del
agua.
A los tres órdenes de Gobierno les corresponde administrar los recursos
hídricos en forma incluyente, salubre, aceptable y asequible, así como
propiciar la acción ciudadana para hacer uso responsable de este recurso,
concluyó Rafael Díaz Leal Barrueta.
“Yo les digo, hay que cuidar el agua, antes teníamos que salir lejos, ahora ya
la tenemos aquí, hay que cuidarla”, aseguró Doña Filiberta.