Los albergues que fueron diseñados para dar atención a familiares de pacientes del hospitales Nicolás San Juan y Adolfo López Mateos de la ciudad de Toluca se encuentran abandonados y cerrados, lo que ha ocasionado que las personas que acuden por el parte médico tienen que improvisar casas de campaña para cubrirse de las inclemencias del tiempo.
En el caso del hospital Nicolás San Juan, el albergue que se construyó para dar atención a los familiares de personas internadas en dicho nosocomio no funciona, por lo que la gente decide fabricar sus espacios para esperar noticias de los médicos.
Mientras que en el hospital Adolfo López Mateos los familiares permanecen a las afueras no han instalado carpas o casas de campaña, pero si llueve se resguardan en los puestos de comida que se encuentran en los alrededores, debido a que el albergue que fue construido para dar servicio a los familiares está cerrado.
“Las lluvias ya llegaron y algunos nos hemos mojado, algunos otros traen un carro y ellos esperan en el mismo, pero si hay personas que se ven obligados a cubrirse del agua en algún techo improvisado”, comentó una señora que se encontraba a las afueras del Hospital Nicolás San Juan.
También comentó que no se pueden retirar del lugar porque los médicos o enfermeras les solicitan medicamentos, productos de limpieza u algún otro insumo para el paciente y deben estar atentos, o simplemente para que les den información.
La señora Agustina, dijo que como ella que procede del municipio de Almoloya de Juárez está muy lejos su casa, por lo que prefieren quedarse en el lugar y se ven obligados a comprar incluso hules para taparse del frío y la lluvia.
En el Centro Médico “Adolfo López Mateos” también existen personas a las afueras del hospital en espera de información y aunque no hay casas de campaña, la mayoría de espacios son utilizados por puestos ambulantes y los vehículos son usados como salas de espera.
Cabe mencionar que en el caso de los familiares de pacientes del Hospital para El Niño y el de la Mujer existe un albergue que administra el DIFEM “La Casita”, sin embargo, no todos lo utilizan, porque no quieren estar lejos de la puerta donde les brindan el servicio y deciden colocar sus casas de campaña.