Armando Leñero, integrante del Centro de Estudios del Empleo Formal (CEEF) precisó que México requiere la creación de un millón 200 mil plazas formales para poder hablar de un óptimo crecimiento del mercado de trabajo, debido a que el país debería estar creciendo con al menos 740 mil fuentes laborales al año, para hablar de una recuperación real.
Asimismo, dijo que la crisis laboral no comenzó a raíz de la pandemia por COVID-19, sino que dicho fenómeno de salud, solo aceleró una tendencia que ha sido constante desde el inicio de sexenio, en la que la creación de empleos formales ha ido a la baja.
En entrevista, dijo, que en el 2020 el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró, que de acuerdo a una estrategia de gobierno exitosa, la recuperación se aceleraría durante septiembre y octubre.
«De haberse logrado este escenario, se tendría un registro similar al de puestos de trabajo previo a la pandemia, es decir, 20, 613,536 empleos, de acuerdo con datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Empero, para enero de 2021, se tuvo registro ante el IMSS de 19, 821,651 empleos, por lo que alcanzar el número de plazas planteado, más lo que se ha dejado de generar en el sexenio, no será una realidad hasta el 2025”.
El también analistas del CEEF indicó que aseverar que las fuentes de trabajo se recuperarán en el país para marzo de 2021, es un indicador de que el gobierno no tiene una estrategia definida para combatir la crisis en el mercado laboral, el cual, está marcado por la disminución en programas para fomento del empleo.
Armando Leñero agregó que existen nueve millones de personas que no trabajan, a las cuales, se les suman las 2.5 millones en el desempleo abierto, es decir, en total, se tienen 11.5 millones de personas sin empleo, dicha situación ha generado un aumento en la pobreza, y se estima que este fenómeno impacte a 10 millones de mexicanos, para quienes la única opción es la informalidad.
Finalmente el presidente del CEEF, comentó que no es posible terminar con la pobreza laboral, ni con otros escenarios de precariedad en el ámbito laboral, como el desempleo de los jóvenes, a través de apoyos sociales.
“El apoyo requerido es brindar un sustento sólido para las MIPYMES, que son las mayores generadoras de empleo, y a ello, se agregan cambios fiscales que motiven a las empresas para continuar con una contratación formal”.