Irlanda Hernández Téllez, titular de la Coordinación de Voluntades Anticipadas del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), dio a conocer que en 2022 se registraron casi mil trámites.
«La pandemia de Covid-19 redujo el número de personas que se suscribían y tramitaban el acta de voluntad anticipada en el Estado de México, pero en el año 2022 de acuerdo a la Coordinación de Voluntades Anticipadas las solicitudes fueron un poco más» comentó.
La emergencia sanitaria, dijo, provocó una baja considerable en el número de formatos a pesar de que se facilitaron los trámites como por ejemplo la implementación de la firma electrónica.
“Si hubo un impacto de la pandemia en el número de solicitudes, principalmente por la situación de la gente vivía en la incertidumbre y el temor de contagiarse del virus”, añadió la titular de la Coordinación de Voluntades Anticipadas.
Informó que en el año 2014 se suscribieron a este trámite 213 personas, para el año 2015 fueron 466 personas, el año 2016 se incrementó el número a 631 personas, en el año 2017 fueron 725 personas, para el 2018 fueron 673 personas y en el año 2019 se registraron 652 personas.
Para el año 2020 derivado de la pandemia, dio a conocer, hubo un decremento importante pues bajó a 468 personas que solicitaron el trámite, en el año 2021 se emitieron 635 actas y para el año 2022 se logró la meta récord pues se tramitaron 982 actas.
Hernández Téllez, detalló que son más mujeres que hombres las que solicitan esta condición y por obvias razones son personas mayores de 60 años, quienes más realizan el trámite en mención.
Cabe señalar que existen dos vías de suscripción de acta de voluntad anticipada, una de ellas a través de unidades médicas de forma gratuita, pues en cada hospital hay una persona responsable que los acompaña desde el inicio hasta terminar el tramite, con los únicos requisitos de acudir con un familiar o representante legal y dos testigos, así como su resumen clínico.
La otra modalidad, finalizó, es mediante una escritura de voluntad anticipada y se tramita a través de un notario público, aunque el costo oscila entre los 3 mil 500 hasta 8 mil pesos.